Esto lo escribí hace un més, pero creo que se merece su hueco en el blog.
Veo toda esta trama Al-Bea-Nacho súper liada y me desconcierta profundamente. Me hace ir de un lado a otro, primero pienso una cosa, luego otra, luego vuelta la burra al trigo, luego como la segunda pero con variantes, luego...jajajja vamos que estoy hecha un lío:
- No se si quiero ver a Álvaro fuera de la cárcel o verlo dentro, porque así como esta el tema al menos con el Anguila me río.
- Unas veces me sulfuro con Bea porque no entiendo sus cambios de sentimientos repentinos, pero por otro lado hay veces que entiendo que tenga dudas
- No se si quiero que se vayan a la cabaña y le confiese su amor por Al o confiese su amor por Nacho. Es que como no me gusta nada esta Bea a veces pienso que es mejor que se quede con Nacho y que Álvaro empieza una súper historia de amor bonita y romántica con otra chica nueva, de esas que nos gustan, pero por otro lado uff!! Después de desear arrejuntarlos durante tanto tiempo sería una pena que no acabaran juntos.
- No sé si quiero que sea Bea ahora quien sufra por recuperar a Álvaro o que no sufra porque ya lloro bastante en el pasado.
- No sé si quiero que Al intente de nuevo recuperar a Bea o que sea él ahora quien no quiera nada con ella porque ya se arrastró y ya ha pagado por sus fallos.
Estoy en un punto de la historia que "solo sé que no se nada". Aunque algo si tengo claro, lo que me gustaría que pasara:
- Que los guionistas dieran un cambio de 180º a la serie, no mejor de 360º, para que volviera al punto inicial pero con el bagaje de lo vivido hasta ahora. Ver esa dulzura de Bea de nuevo, una Bea que volviera a soñar, una Bea sonriente, afrontando las situaciones con inteligencia, mas madura y menos inexperta que antes por supuesto, que hubiera aprendido de lo que le ha pasado pero que conservara algo de esa esencia inicial, de esa integridad, esa entereza, esa lucha, esa entrega, esa fidelidad, una Bea con sus sentimientos claros, una Bea locamente enamorada de Álvaro.
-Me gustaría ver el Álvaro ilusionado del principio, con la madurez, la entereza, con la seguridad, la convicción y la determinación que ha ido adquiriendo de su paso por la cárcel. El Álvaro responsable, luchador y firme que es ahora pero conservando esa picardía, esa chispa y ese punto de niño travieso de antes. Un Álvaro locamente enamorado de Bea, capaz de desvivirse por ella, capaz de escucharla, de entenderla, de preocuparse por conocerla realmente. Un Álvaro dirigiendo de nuevo Bulevar intentando hacer realidad su sueño inicial, pero esta vez trabajando por ello, con honestidad, buenas maneras e inteligencia. Un Álvaro siendo un buen Director pero sin desdibujar del todo esa parte de de locura juvenil del principio de la serie.
Algo así como una Bea y un Álvaro de los primeros capítulos pero mejorados por lo que les ha tocado vivir, reforzados en sus carencias pero conservando su esencia inicial.
También me gustaría recuperar el sentido de la amistad, Gonzalo con Álvaro y Santi con Bea porque a mi modo de ver se ha ido difuminando en el tiempo. Que volvieran esos dos confidentes y que en verdad lo fueran, mas maduros también, pero conservando si incondicionalidad. Que Gonzalo volviera a ser el amigo-escudero de Álvaro pero escuchándole y sin influenciarlo y que Santi volviera ser ese confidente y esa mano amiga en la que se apoyaba Bea, que volviera el sentido de la amistad sincera y verdadera.
Me gustaría volver a ver el trabajo codo con codo, ese equipo, esta vez no como jefe y secretaria sino de igual a igual, ver luchar a un hombre y una mujer, que se entienden, que se complementan, que conectan y que tiene una química y una complicidad especial y mágica, por un mismo objetivo (expandir la revista) con ilusión, con empuje, con entusiasmo, con problemas que poder resolver conjuntamente, haciendo frente al unísono con la fuerza que da hacerlo sabiendo que hay alguien al otro lado dándote la mano por si resbalas.
Quiero ver un malo malísimo que no roce lo excéntrico, que su maldad no implique la fuerza física sino que se diferencie y se distinga por usar la misma inteligencia que los protagonistas pero con fines menos "honestos". Un malo inteligente, con doblez, con rabia, con mala intención, pero una mala intención reconocible y aceptable, un malo que no se estereotipe al extremo.
-Quiero ver a una Bárbara evolucionando internamente porque es de las pocas que no lo ha hecho. Una Bárbara conservando su solitaria neurona, siendo ella misma, pero capaz de vivir su propio proceso de maduración, capaz de plantearse valores que hagan tambalear los cimientos sobre los cuales se ha refugiado hasta ahora. Una Bárbara capaz de reconocer que quiere sentirse querida y que la quieran tal cual es. Una Bárbara capaz de enamorarse de Santi.
- Quiero chicas nuevas en el batallón, para que vuelva realmente a serlo, que den aire fresco, alegría, que creen nuevas tramas, nuevas situaciones en las que se pueda cotillear, que se pudieran convocar de nuevo 112 y ver así el apoyo entre mujeres algo olvidado y devaluado últimamente, que volvieran a ser una piña, con Bea incluida, que generaran situaciones divertidas y volvieran los puntos de vista de la mujeres de verdad.
-Me gustaría ver un Carmelo capaz de admitir sus errores, capaz de perdonar e incluso olvidar, capaz de decirle a Álvaro lo honrado, valiente y fuerte que ha sido de la misma manera que le dijo que era una basura el día que lo llevó borracho a su casa. Un Carmelo capaz de dejar vivir su vida a su hija, dándole su opinión pero no imponiendo sus consejos. Un Carmelo capaz ponerse en el lugar de los demás y de aceptar las decisiones de su hija aunque no las comparta.
- Me gustaría volver a ver a Titina, la Titina que estaba al lado de su hijo, que le entendía, que le ayudaba, una Titina que adoraba a su hijo, capaz de emocionarse ante el amor verdadero, capaz de no juzgar a las personas por sus apariencias, capaz de valorar a los demás y sobretodo capaz de alegrarse por ver a su hijo feliz junto a Bea, de reconocer que Bea hace feliz a su hijo y que el amor sincero e incondicional es el motor que mueve sus mundos .
-Me gustaría ver una Cayetana que se olvida de las clases sociales, que sea capaz de ver a las personas por como son y capaz de reivindicarlo ante amigos y conocidos. Feliz, enamorada, correspondida. Una Cayetana fiel a su manera de ser pero más humilde y menos altiva.
- Y me gustaría ver un Benito más seguro, al que se le reconozca su trabajo, su valía, su entrega... Un Benito igual de pobre pero con un sueldo digno, con una estabilidad y con la misma profundidad como aquel día en el que le enseñó a Álvaro que significaba estar enamorado y sentir.
- También me gustaría ver a un Francisco valorando a su hijo, estando orgulloso de él. Una Carol capaz de ver el amor de Álvaro por Bea y el de Bea por Álvaro como antes, porque creo que Nacho la ha obnubilado últimamente. Una Puri que sufriera un poquito que le hicieran un poquito de daño (sin pasarse) para que entendiera un poco a los demás, vamos tuviera más inteligencia emocional. Un Guti recuperando al amor de su vida Chusa. Un Richard y un Eche enfrentándose ante el mundo su relación, y por supuesto quiero ver al Anguila.
Y con todo esto no quiero decir que necesariamente durante estas tramas Bea y Álvaro tengan que estar ya juntos de nuevo, ni que todo les tenga que salir bien, es más, me imagino este proceso de una manera paulatina, conociéndose como se conoce al principio una pareja cualquiera, me imagino situaciones comprometidas, otras tiernas, otras tristes, unas de lucha, otras de entrega, unas de impulsos descontrolados, otras de control contenido, pero si me los imagino cada uno caminando sobre su propia línea ,unas líneas paralelas, con paso lento, firme pero decidido, avanzando cada día un poco más, hasta que esas líneas paralelas por fin converjan en un mismo punto para cruzarse uno en el camino del otro y convertirlas en una sola línea sin fin.
Bueno, siento el rollo. Quizá espero demasiado de la serie , de los guionistas y de la Directora Creativa, pero.... no estoy loca que sé lo que quiero, vivo la vida igual que si fuera un sueño. jajaja
Veo toda esta trama Al-Bea-Nacho súper liada y me desconcierta profundamente. Me hace ir de un lado a otro, primero pienso una cosa, luego otra, luego vuelta la burra al trigo, luego como la segunda pero con variantes, luego...jajajja vamos que estoy hecha un lío:
- No se si quiero ver a Álvaro fuera de la cárcel o verlo dentro, porque así como esta el tema al menos con el Anguila me río.
- Unas veces me sulfuro con Bea porque no entiendo sus cambios de sentimientos repentinos, pero por otro lado hay veces que entiendo que tenga dudas
- No se si quiero que se vayan a la cabaña y le confiese su amor por Al o confiese su amor por Nacho. Es que como no me gusta nada esta Bea a veces pienso que es mejor que se quede con Nacho y que Álvaro empieza una súper historia de amor bonita y romántica con otra chica nueva, de esas que nos gustan, pero por otro lado uff!! Después de desear arrejuntarlos durante tanto tiempo sería una pena que no acabaran juntos.
- No sé si quiero que sea Bea ahora quien sufra por recuperar a Álvaro o que no sufra porque ya lloro bastante en el pasado.
- No sé si quiero que Al intente de nuevo recuperar a Bea o que sea él ahora quien no quiera nada con ella porque ya se arrastró y ya ha pagado por sus fallos.
Estoy en un punto de la historia que "solo sé que no se nada". Aunque algo si tengo claro, lo que me gustaría que pasara:
- Que los guionistas dieran un cambio de 180º a la serie, no mejor de 360º, para que volviera al punto inicial pero con el bagaje de lo vivido hasta ahora. Ver esa dulzura de Bea de nuevo, una Bea que volviera a soñar, una Bea sonriente, afrontando las situaciones con inteligencia, mas madura y menos inexperta que antes por supuesto, que hubiera aprendido de lo que le ha pasado pero que conservara algo de esa esencia inicial, de esa integridad, esa entereza, esa lucha, esa entrega, esa fidelidad, una Bea con sus sentimientos claros, una Bea locamente enamorada de Álvaro.
-Me gustaría ver el Álvaro ilusionado del principio, con la madurez, la entereza, con la seguridad, la convicción y la determinación que ha ido adquiriendo de su paso por la cárcel. El Álvaro responsable, luchador y firme que es ahora pero conservando esa picardía, esa chispa y ese punto de niño travieso de antes. Un Álvaro locamente enamorado de Bea, capaz de desvivirse por ella, capaz de escucharla, de entenderla, de preocuparse por conocerla realmente. Un Álvaro dirigiendo de nuevo Bulevar intentando hacer realidad su sueño inicial, pero esta vez trabajando por ello, con honestidad, buenas maneras e inteligencia. Un Álvaro siendo un buen Director pero sin desdibujar del todo esa parte de de locura juvenil del principio de la serie.
Algo así como una Bea y un Álvaro de los primeros capítulos pero mejorados por lo que les ha tocado vivir, reforzados en sus carencias pero conservando su esencia inicial.
También me gustaría recuperar el sentido de la amistad, Gonzalo con Álvaro y Santi con Bea porque a mi modo de ver se ha ido difuminando en el tiempo. Que volvieran esos dos confidentes y que en verdad lo fueran, mas maduros también, pero conservando si incondicionalidad. Que Gonzalo volviera a ser el amigo-escudero de Álvaro pero escuchándole y sin influenciarlo y que Santi volviera ser ese confidente y esa mano amiga en la que se apoyaba Bea, que volviera el sentido de la amistad sincera y verdadera.
Me gustaría volver a ver el trabajo codo con codo, ese equipo, esta vez no como jefe y secretaria sino de igual a igual, ver luchar a un hombre y una mujer, que se entienden, que se complementan, que conectan y que tiene una química y una complicidad especial y mágica, por un mismo objetivo (expandir la revista) con ilusión, con empuje, con entusiasmo, con problemas que poder resolver conjuntamente, haciendo frente al unísono con la fuerza que da hacerlo sabiendo que hay alguien al otro lado dándote la mano por si resbalas.
Quiero ver un malo malísimo que no roce lo excéntrico, que su maldad no implique la fuerza física sino que se diferencie y se distinga por usar la misma inteligencia que los protagonistas pero con fines menos "honestos". Un malo inteligente, con doblez, con rabia, con mala intención, pero una mala intención reconocible y aceptable, un malo que no se estereotipe al extremo.
-Quiero ver a una Bárbara evolucionando internamente porque es de las pocas que no lo ha hecho. Una Bárbara conservando su solitaria neurona, siendo ella misma, pero capaz de vivir su propio proceso de maduración, capaz de plantearse valores que hagan tambalear los cimientos sobre los cuales se ha refugiado hasta ahora. Una Bárbara capaz de reconocer que quiere sentirse querida y que la quieran tal cual es. Una Bárbara capaz de enamorarse de Santi.
- Quiero chicas nuevas en el batallón, para que vuelva realmente a serlo, que den aire fresco, alegría, que creen nuevas tramas, nuevas situaciones en las que se pueda cotillear, que se pudieran convocar de nuevo 112 y ver así el apoyo entre mujeres algo olvidado y devaluado últimamente, que volvieran a ser una piña, con Bea incluida, que generaran situaciones divertidas y volvieran los puntos de vista de la mujeres de verdad.
-Me gustaría ver un Carmelo capaz de admitir sus errores, capaz de perdonar e incluso olvidar, capaz de decirle a Álvaro lo honrado, valiente y fuerte que ha sido de la misma manera que le dijo que era una basura el día que lo llevó borracho a su casa. Un Carmelo capaz de dejar vivir su vida a su hija, dándole su opinión pero no imponiendo sus consejos. Un Carmelo capaz ponerse en el lugar de los demás y de aceptar las decisiones de su hija aunque no las comparta.
- Me gustaría volver a ver a Titina, la Titina que estaba al lado de su hijo, que le entendía, que le ayudaba, una Titina que adoraba a su hijo, capaz de emocionarse ante el amor verdadero, capaz de no juzgar a las personas por sus apariencias, capaz de valorar a los demás y sobretodo capaz de alegrarse por ver a su hijo feliz junto a Bea, de reconocer que Bea hace feliz a su hijo y que el amor sincero e incondicional es el motor que mueve sus mundos .
-Me gustaría ver una Cayetana que se olvida de las clases sociales, que sea capaz de ver a las personas por como son y capaz de reivindicarlo ante amigos y conocidos. Feliz, enamorada, correspondida. Una Cayetana fiel a su manera de ser pero más humilde y menos altiva.
- Y me gustaría ver un Benito más seguro, al que se le reconozca su trabajo, su valía, su entrega... Un Benito igual de pobre pero con un sueldo digno, con una estabilidad y con la misma profundidad como aquel día en el que le enseñó a Álvaro que significaba estar enamorado y sentir.
- También me gustaría ver a un Francisco valorando a su hijo, estando orgulloso de él. Una Carol capaz de ver el amor de Álvaro por Bea y el de Bea por Álvaro como antes, porque creo que Nacho la ha obnubilado últimamente. Una Puri que sufriera un poquito que le hicieran un poquito de daño (sin pasarse) para que entendiera un poco a los demás, vamos tuviera más inteligencia emocional. Un Guti recuperando al amor de su vida Chusa. Un Richard y un Eche enfrentándose ante el mundo su relación, y por supuesto quiero ver al Anguila.
Y con todo esto no quiero decir que necesariamente durante estas tramas Bea y Álvaro tengan que estar ya juntos de nuevo, ni que todo les tenga que salir bien, es más, me imagino este proceso de una manera paulatina, conociéndose como se conoce al principio una pareja cualquiera, me imagino situaciones comprometidas, otras tiernas, otras tristes, unas de lucha, otras de entrega, unas de impulsos descontrolados, otras de control contenido, pero si me los imagino cada uno caminando sobre su propia línea ,unas líneas paralelas, con paso lento, firme pero decidido, avanzando cada día un poco más, hasta que esas líneas paralelas por fin converjan en un mismo punto para cruzarse uno en el camino del otro y convertirlas en una sola línea sin fin.
Bueno, siento el rollo. Quizá espero demasiado de la serie , de los guionistas y de la Directora Creativa, pero.... no estoy loca que sé lo que quiero, vivo la vida igual que si fuera un sueño. jajaja
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